El progresivo envejecimiento de la población implica tener cada vez más ancianos y con una mayor esperanza de vida. Que eso es positivo, no cabe ninguna duda. Pero tiene sus consecuencias: los cuidadores se han convertido en figura esencial de nuestra sociedad. Por desgracia, con demasiada frecuencia, cuidar de los demás es un trabajo poco valorado.
Las tareas de los cuidadores son muy diversas: la higiene del paciente, su alimentación, su medicación, y cómo no, su salud emocional y racional. A menudo, el apoyo a la propia persona cuidadora lo asumen los familiares de la persona cuidada. Y aunque, por una parte, puede ser gratificante (pues son conscientes de la dedicación de aquélla a la persona dependiente), también puede generar sentimientos de sobrecarga y soledad.
Pero tanto si los cuidadores son familiares como profesionales, a menudo disimulan o esconden su propia vulnerabilidad y fragilidad emocional por querer infundir seguridad en la persona cuidada. Esto puede condicionar, a la larga, su actuación en tanto que cuidador y persona. La sobrecarga de trabajo de los cuidadores de cuidados tiene un impacto negativo en la salud física y mental, así como en el bienestar y la trayectoria vital de las personas cuidadoras.
Tarjeta Cuidadora del Ayuntamiento de Barcelona
En Barcelona se estima que unas 355.000 personas se dedican al cuidado y atención de personas con discapacidad, enfermedad o dependencia. Es una tarea indispensable, máxime con el progresivo envejecimiento de la población, y que no siempre se valora lo suficiente.
El Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en marcha la Tarjeta Cuidadora, pensada para las personas que se dedican a cuidar de los demás, sean o no profesionales en este ámbito. La iniciativa ofrece 14 recursos, como canales de información personalizados, apoyo emocional y psicológico, acompañamiento jurídico, ventajas en el ámbito deportivo, cultural, etc. Todos enfocados a facilitar la vida a los/las cuidadores/as y evitar que se sientan aislados y poco apoyados.
La Tarjeta Cuidadora es gratuita y se puede solicitar a partir del 29 de septiembre en un apartado específico de la web del Ayuntamiento de Barcelona o presencialmente en Espacio Barcelona Cuida (c/ Viladomat, 127) como en cualquiera de las oficinas de Villa Vecina. Incluso se ha habilitado el teléfono 934 132 121 para resolver dudas sobre la solicitud y la obtención de la tarjeta. En la propia web encontrarás los requisitos y condiciones para obtener la tarjeta.
Las farmacias son el primer eslabón de la cadena asistencial
La farmacia es el primer establecimiento sanitario al que acude el paciente, y lo mismo el cuidador. Somos el primer eslabón de la cadena asistencial. La farmacia conoce bien la medicación de cada paciente, con lo que es de gran ayuda para los cuidadores. Les ofrecemos consejo, atención y podemos compartir su estado de ánimo y emociones por el desgaste que supone cuidar a unas personas que necesitan atención constante.
En los últimos tiempos, las farmacias se han convertido en aliados de los cuidadores, porque la tendencia de las Administraciones Sanitarias es a delegar en el propio paciente la autogestión de su salud. De modo que tanto pacientes como cuidadores necesitan más consejo y asesoramiento profesional personalizado, y la farmacia es el lugar más accesible donde obtenerlo.
Así, las farmacias asumimos el rol de promotores de la salud, que va más allá de nuestra función de dispensar medicamentos, con un enfoque integral en el cuidado de las personas frágiles o vulnerables.
El hecho de estar cerca de nuestros pacientes y sus cuidadores, en un entorno distinto al de las consultas médicas, nos permite saber aquellas necesidades que tienen estos y así contribuir a “cuidar”. Gracias al entendimiento que se genera entre la farmacia y los/las cuidadores/as se consigue en mayor medida el cumplimiento de los tratamientos que se indican a los pacientes.
Atender y escuchar a las cuidadoras, aún más que a otros colectivos
Cuidadores y cuidadoras vienen a nuestra farmacia día sí y día también. En Farmacia Ribot podemos hacer junto contigo el seguimiento de tu paciente (persona a la que cuidas). Asimismo, también podemos apoyarte para que tu salud, tu estado de ánimo y tus energías no te dejen de lado. Te indicamos algunos de los apoyos que te podemos ofrecer:
- Servicio de revisión del botiquín: ayuda a organizar las tomas de la medicación del paciente. Yjunto contigo, contribuimos a que el paciente no deje la medicación porque tenga efectos adversos, interacciones, o equivocaciones con otros medicamentos.
- Por otra parte, cada vez hay más personas mayores con enfermedades crónicas, lo que implica muchas veces polimedicación. Para ello, te ayudamos con el sistema personificado de dosificación (SPD) para revisar contigo las medicaciones de la persona a la que cuidas.
- Tú sabes lo importante que es manejar con cuidado a tu paciente. Te asesoramos en hábitos posturales, cómo coger al anciano, poner y quitar un pañal, cómo bañarlo/a, buenas prácticas para una alimentación equilibrada específica para nuestros mayores, etc.
Farmacia Ribot se ha adherido a este proyecto conjunto entre el Colegio de Farmacéuticos de Barcelona y el Ayuntamiento de Barcelona aliado para apoyarte en todo lo que conllevan las tareas y trabajos relacionados con la persona a la que cuidas, no solo en el seguimiento farmacológico.
¡Acércate a la farmacia y cuéntanos en qué te podemos ayudar!